1. Complementos. Un ambiente puede verse totalmente renovado con el recambio de sus complementos: cojines, fulares, centros de mesa, floreros, cuadros… Centra el juego decorativo en los pequeños objetos y lograrás un lavado de cara instantáneo para tu casa.
2. Velas. Ideales para otoño-invierno, además de dar un toque de romanticismo a cualquier ambiente, significan un ahorro de energía. La mejor estrategia: ensayar con tamaños y texturas, y con las figuras que describen en conjunto
2. Velas. Ideales para otoño-invierno, además de dar un toque de romanticismo a cualquier ambiente, significan un ahorro de energía. La mejor estrategia: ensayar con tamaños y texturas, y con las figuras que describen en conjunto
4. Muebles reciclados. Si buscas un nuevo protagonista para alguna habitación, tal vez lo tengas en tu desván o lo encuentres en algún mercadillo. Un poco de esfuerzo y materiales económicos y asequibles (barniz, lijas, cepillos de carpintero) pueden renovar el alma de un mueble viejo. La madera tiene mucho que ofrecer, en especial cuando está envejecida y llama a las evocaciones rústicas.
5. Cuadros. No es necesario recurrir a pinturas originales o reproducciones. Las láminas y carteles antiguos, los retratos en blanco y negro, los bocetos a lápiz… Cualquier motivo, bien utilizado, dará nuevo brillo a tus paredes.
Fuente: Tips Economicos